Hola! Ya estoy aquí para contaros la súpersalida que hicimos el otro día. Uf! qué ganitas teníamos de salir del cole todos juntos!! Hacía....ya ni me acuerdo. Pues esta vez no nos subimos al autobús ni nada, nos fuimos cerquita, cerquita. Íbamos todos la mar de contentos con nuestras mochilas. Mi amigo, en cuanto llegó al parque, ya quería comerse el bocadillo. Entramos por la puerta principal del parque , pero antes leímos el cartel de la entrada.
Lo primero que nos fijamos fue en los árboles, pero qué forma más rara tenían! Nos contó la seño que el jardinero los va podando así, que es como cuando a nosotros nos cortan el pelo, con flequillo, más larguito por aquí, más cortito por allá. Vimos un montón de flores y vimos una que parecía un pájaro! Vimos también algunas lombrices y mariposas y la seño cogió una cochinita que se enroscaba entera. Nos la pasó de mano en mano, pero a algunos de mis compis les daba miedo. Yo no sé porqué, ¡porque no hacen nada!
Desayunamos en el templete, con los compis de 4 años; como es muy grande!
Había pistas por todas partes, en la fuente de los niños del paraguas, detrás de la escultura de Jose María Pemán, en un banco (pero ahí tuvimos que contar un montón de bancos), en el estanque de los patos...
Y hasta dentro de la cueva!
Después juntamos todas las letras que habíamos encontrado en cada pista y formamos una frase: ¡Vivan las plantas!
Después jugamos un ratito en el tobogán. En los columpios no podíamos porque había niños pequeñitos y la seño nos dijo que esa era su hora.
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