viernes, 13 de diciembre de 2019

CAPACIDADES DIFERENTES

Hola familias! hoy voy a contaros cómo conseguimos, mis amigo/as y yo nuestro pasaporte por el día de las capacidades diferentes. Sí, sí, ese que llevé a casa el otro día. Pues veréis, fue muy divertido. Un día, la seño, (ya os imagináis lo que hizo la seño eh? ), nos preguntó qué ocurriría si no pudiéramos hablar. Jó! nos quedamos....porque yo no sé qué haría si no pudiera hablar. Entonces la seño nos lanzó un beso con las manos y volvió a preguntar ¿qué os digo cuando hago ésto? Claaaaaaro, eso lo sabíamos, eso es muy fácil, yo se lo hago a mi mamá cuando me lleva al cole. Y también movió la mano ¡ nos decía "adiós!. Pero, eso qué tenía que ver? Ah! ya entendimos: hay cosas que se pueden decir con las manos! Pues no, resulta que tooooodo se puede decir con las manos. Y, entonces, nos puso en la pizarra un grupo de niño/as cantando un villancico y lo hacían con las manos! Nosotros aprendimos a decir "navidad" y "amor", pero es un poco difícil eh?
Después vimos un partido de baloncesto, pero no era un partido cualquiera, porque todos los jugadores iban en sillas de ruedas! Madre mía cómo corrían!
Entonces un compi dijo "¿y si no veo? si no veo qué hago?"Uf, eso sí que es difícil.
Y nos fuimos al salón. Allí nos esperaban algunos maestros, que nos habían preparado unos juegos, a ver si entendíamos estas cosas un poco mejor. Hicimos unas pruebas súperdifíciles. En una, que estaba el maestro Manolo, teníamos que saltar con una pierna sólo. En otra, con el maestro Álvaro,teníamos que encestar una pelota, pero con la otra mano!. No dábamos ni una! Mira, mira:


Con la seño Paloma teníamos que meter las manos en una bolsa y adivinar qué era, pero sólo tocando eh?


Y con la seño Mariángeles teníamos que ir con los ojos tapados, andando por el salón, pero sin tropezar ni nada. ¿A que no sabéis cómo? llevábamos un bastón! Menos mal que la seño nos ayudó, porque si no....




Después, Manolo nos enseñó a decir más cosas con las manos, buenos días, buenas tardes. Y a adivinar qué eran las cosas que oíamos. 
Cada vez que hacíamos una prueba, nos ponía el sello en nuestro pasaporte.
Ahora ya sé que toooooooooooooodo/as podemos hacer muuuuuuuchas cosas, aunque las hagamos de manera diferente. Y también sé que hay una cosa que a todos los niño/as del mundo mundial nos gusta: que nos quieran mucho, mucho, mucho.  


No hay comentarios:

Publicar un comentario